Las empresas generalmente buscan profesionales que tengan una serie de cualidades tales como creatividad, empatía y flexibilidad, ya que estas ayudarán a labrar un mejor futuro laboral. Pero, ¿es posible desarrollar el talento profesional?, estudios indican que ser más creativo, adaptarse a los cambios, desenvolverse con soltura trabajando en equipo, tener facilidad para tomar decisiones o incluso desarrollar la empatía es 100% posible, lo importante es dar pautas claras que fomenten el desarrollo de habilidades en el trabajo y ayuden a tener un futuro profesional prometedor.
En este artículo explicaremos varias de estas pautas que debes tener en cuenta para ti como empresario, para ti que eres gerente y para los clientes internos en general de la organización.
En primer lugar ser coherentes entre lo que se dice y lo que se hace es fundamental. Tanto el personal directivo-gerencial como el resto de los integrantes de la compañía deben tener un mínimo poder de persuasión, teniendo en sí la capacidad de poder influir de alguna manera en las demás personas. Por ejemplo, un empleado no gerencial podría saber que implantar algún procedimiento nuevo traerá una mejora y requerirá convencer a los jefes de ello, incluso los directivos tienen que lograr, día a día, que los equipos de trabajo den lo mejor de sí mismos y se comprometan.
Si bien es cierto que las organizaciones valoran cada vez más aquellos profesionales que se adaptan con eficacia a las distintas situaciones, personas y entornos, es decir, al perfil que se conoce como "profesional flexible". También es cierto que las organizaciones deben aprender a ser flexibles con sus empleados. El mundo laboral actual se caracteriza por la presencia de cambios permanentes es por ello que la flexibilidad juega un papel fundamental dentro de una empresa.
La autoconfianza es la tercera pauta que quisiéramos resaltar, ya que es una cualidad clave para ser un profesional competente y valorado, donde se confía en la capacidad que tiene cada uno para ejecutar con éxito cualquier tarea, y sabe mantener y defender sus opiniones. Muchos profesionales, incluso directivos de empresas podrían preguntarse ¿y si no poseo esa cualidad innata en mi?, pues ya es hora de comenzar a desarrollarla, atrévete a asumir riesgos y perder el miedo a equivocarte, pregúntate qué opinan los demás de ti mismo y reflexiona el porqué podrían pensar eso, tratando de convertirlo en cosas positivas.
Esta cualidad abre paso a otra muy importante y es la facilidad para tomar decisiones. El mundo laboral hace que se valoren cada vez más aquellos profesionales capaces de tomar decisiones acertadas a tiempo. Para ello identifica bien el problema, identifica las alternativas y evalúalas y luego selecciona la que consideres mejor opción.
En próximo artículo estaremos dando el resto de pautas, cualidades y destrezas que debes manejar para potenciar tus habilidades profesionales y asegurar un futuro laboral competente.
Zeli Negrón / Grupo DASA


